Empresas de Familia
Con alta frecuencia las empresas de familia que no han realizado un proceso de profesionalización pierden agilidad debido a los temas internos propios de la dinámica familiar no resuelta.
Es común ver hermanos peleados entre sí a cargo de áreas que se transforman en feudos, áreas que compiten en vez de colaborar, saboteando conscientemente o no al área de su primo. Padres que siguen tapando los errores grandes de sus hijos gerentes como cuando éstos eran niños, …. o aquellos otros que no pueden validar que uno de sus tres hijos claramente debe liderar la empresa (eso sería “hacer diferencias”) y fundadores que hace 15 años anuncian a sus hijos que “en cualquier momento se retiran”. La lista de ejemplos negativos es larga y la utilizamos para el primer diagnóstico del tema familiar, excediendo el presente artículo.
El tema en cuestión es que ese día a día familiar lleva tiempo, distrae, desmotiva y expulsa a los colaboradores que no pertenecen a la familia, produce severas pérdidas de objetividad en la toma de decisiones, demora lanzamientos de mejoras, resienten la atención de los clientes y … esta la lista también es larga.
Hay muchas herramientas simples para solucionar cada uno de los distintos problemas ocasionados por la raíz familiar de toda empresa, todo parte de tomar conciencia de los dos párrafos anterior, visualizarlos en la propia empresa.
Si luego de ello se coincide en que al Mercado nada le interesa si somos una empresa familiar o no, sino que lo atendamos igual o mejor que el resto de los jugadores, sólo queda un paso por dar: Manos a la obra para solucionar todos los aspectos familiares que están haciendo que nuestra empresa sea menos competitiva.